Quiero describir brevemente un lugar simplemente increíble en el sur-este de Venezuela: Monte Roraima, que se encuentra en la Gran Sabana. Se trata de una gran meseta de alrededor de 1000 m sobre el nivel del mar y rodeado por las dos principales cuencas fluviales del río Orinoco (al norte) y Río Amazonas (sur), así como en el interior del Parque Nacional Canaima, que pertenece a la UNESCO Natural Mundial Heritage. Geológicamente, el área entera se compone de rocas metamórficas formadas en la era precámbrica granítica, tan antiguos. Cerca de 150 millones de años, el continente de Gondwana comenzó a romperse y la gran masa de agua del océano Atlántico separa África del bloque sudamericano. Las rocas de la Gran Sabana se cubrieron poco a poco por los depósitos de arena, comprimido, alcanzó un espesor de varios miles de metros. Este es el origen de las areniscas y cuarcitas de las características que hacen de las montañas con cimas planas, llamadas tepuis por Pemon la población amerindia que habita en la zona. La etimología es incierta, el término puede significar "casa de los dioses." Hay más de un centenar de los tepuis en la amplia región que incluye el sur de Venezuela, norte de Brasil y Guyana británica, pero que se encuentran principalmente en la Gran Sabana.
- Vista del Monte Roraima en Venezuela
El tiempo ha erosionado y dio forma a los tepuyes creando extrañas formaciones. Los tepuis estan constantemente húmedo, los rangos de precipitación de 2 a 4 pies cada año, y muchos de ellos tienen impresionantes cascadas suaves por los lados verticales: el Salto Ángel es la más alta del mundo, pero al escalar el Monte Roraima, se puede admirar la cascada (también entre el más alto del mundo) de la vecina Kukenán tepui. Roraima así mismo, con sus 2810m es el más alto tepui en la zona, deja una afluencia masiva de agua en la estación lluviosa y las llamadas lágrimas que refrescan a los escaladores. .
En la parte superior se enfrenta a un paisaje lunar con formas Lifely que son en gran parte endémicas (roraimae Bonnet) de la región y algunos se reúnen sólo aquí (como el sapo Oreophrynella Quelch negro). Los acantilados de cientos de metros de altura, de hecho, imponen una discontinuidad con respecto a la flora y fauna de las partes basales del tepui y la Gran Sabana. Las mismas condiciones climáticas en la parte superior son muy diferentes de la base y no hay rastro en la parte superior, a pesar del clima tropical que estamos en el trópico. El suelo es generalmente rocosa y con sujeción a los fenómenos continuos de la escorrentía, tan pobre en nutrientes. Por consiguiente, los endémicos han desarrollado técnicas extraordinarias de supervivencia: por ejemplo la Heliamphora ha rodado hojas, en forma de tarro, con el fin de almacenar el agua y atraen a los insectos que se puede digerir. Este ecosistema aislado, probablemente sigue siendo en parte inexplorada, un hecho que lo convierte en un auténtico paraíso para los investigadores.
Fue el explorador británico Sir Im Thurm, que fue el primero, y sólo en 1884, logró alcanzar la cima del Roraima Tepui. El camino es muy difícil, para mí, el descenso fue mucho más arduo que el ascenso. La caminata comienza en el pueblo de Paraitepui y toda la caminata (ida y vuelta) dura seis días y cinco noches a pasar dos admitir la parte superior. Esta opción permite disponer de un día completo para descansar un poco y explorar la meseta.
Las aguas de estos tepuyes pertenecen a la cuenca del Río Caroní, que tiene su origen aquí y en Puerto Ordaz, lo que desemboca en el Río Orinoco. Durante kilómetros las aguas de los dos ríos separados por las diferencias en la densidad y composición química. Las aguas del Caroni son oscuras debido al alto contenido de ácidos húmicos que viene de un soporte geológico viejo y pobre en nutrientes, por lo tanto, tienen pequeñas partículas orgánicas en suspensión. No daña las turbinas de las centrales hidroeléctricas grandes que se han construido a lo largo del río y producen alrededor del 70% de la electricidad de Venezuela. Puerto Ordaz es el punto de partida ideal para explorar el Delta del Orinoco o ir en autobús a la Gran Sabana
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